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Fútbol Es indiscutible que el deporte más arraigado en España, es el fútbol; es el deporte que permite presenciar su desarrollo, a mayor contingente de público. Es el deporte de la gran masa. Además tiene otra ventaja sobre otros deportes, como el rugbi, water-polo, hockey, baloncesto, etc. etc., en que contrariamente como ocurre en los citados la intervención del árbitro no es tan frecuente y por tanto el espectador puede gozar y saborear las jugadas durante más tiempo, ya que el fútbol bien jugado se presta a un control efectivo y por ende eficaz del balón.
Poner ilusiones hoy en día en élla, es perder el tiempo y no vivir la realidad. El profesionalismo ha cortado de raiz, lo que de más sano y genuino tenía el fútbol, es decir, moldear y formar jugadores desde el equipo infantil, para nutrir más tarde el reserva y luego contar con buenos jugadores para el primer equipo. Actualmente, cuando un jugador se destaca un poco, después de que el Club ha venido cultivándolo, por ejemplo un par de temporadas, viene un coloso del dinero y en dos minutos se le lleva. Creo por tanto que por ejemplo un Club como nuestro Gerona, no puede confiar en la cantera (magnífica por cierto), de Gerona capital y província, ya que económicamente nos debatimos siempre dentro de una marcada falta de recursos.
Está rayando en lo inhumano. Se pagan sumas exorbitantes. Se cotiza ya casi más un par de pies de un buen jugador, que unas manos de plata de un buen cirujano o un cerebro privilegiado de un hombre de ciencia. Si no se pone coto, se llegará sin duda al caso muy reñido con el verdadero deporte, de que quien podrá tener un buen equipo, será el Club (léase Capital, província o región), que más dinero tenga, aunque si solo contara quien mejores juadores tuviera de la Capital, provincia y región, (esa sería como antaño la verdadera representación del fútbol), entonces muchos clubs hoy relegados a segundo término, superarían a otros que por dinero pueden más. Los casos de un Farró, Trías y Ferrer que por amor al Club desecharon buenas ofertas, hoy día apenas si se dan. Gerona como otros varios Clubs desde luego, no puede luchar. La reciente suscripción es bien demostrativa. Conocido es de todo aficionado al fútbol, lo que representa por ejemplo el esfuerzo del Zaragoza para formar su equipo actual. Tiempo atrás, ocurrió lo mismo en sus momentos de euforia, con el Sabadell y Tarragona. El Gerona es de los equipos de Segunda División más baratos, y por tanto, es un factor que no debe perder de vista, el criticón y eterno descontento.
Hay jugador de fútbol que pronto se desmoraliza. Basta que un sector del público chille, para que ya navegue en el campo. No tiene moral. Le falta temple. Otros, que si llueve, hace viento o frío o calor, ya están destemplados. El jugador moral y físicamente dotado, que son dos aspectos que se complementan, sale al campo y contra viento y marea, rinde siempre. Todos hemos visto en el campo de juego, que por ejemplo un defensa del equipo contrario es abroncado por su juego violento y en cambio sigue impertérrito, no se deja influenciar. Otras veces, que haga el tiempo que haga, lo aguanta todo. Lo mismo que ocurre con el público. Imaginémonos un boxeador. Coge su maleta y con su cuidador, se va solito a encerrarse en un ring de un pais extranjero, no conoce a nadie, a menudo ni el idioma, entre el público contadas voces de aliento y en cambio no se arredra; tiene moral. En cambio en un equipo de fútbol son once hombres en la cancha con plena solidaridad. Para un hombre hecho y derecho, el factor público, poca cosa es.
El jugador que quiera ser algo futbolísticamente, no debe faltar a ningún entrenamiento. Uno de los factores primordiales del buen jugador, debe ser, el saber parar rápidamente y bien el balón. Así está siempre a punto de hacer el pase preciso y al jugador mejor colocado. Al mismo tiempo es el punto de partida para el juego raso, que es el más efectivo, ya que con él, se elimina toda superioridad física. Considero que uno de los jugadores que últimamente han desfilado por Vista Alegre y que más dominaba el disparar el balón, fué Miarnau. Hemos visto muchas veces, que por no saber parar la pelota, un jugador ha tenido que correr tres o cuatro metros atrás, para controlar el rebote que su falta de pericia ha provocado, mientras ha frenado la marcha de la delantera, si era en el momento en que se adelantaba. Hay jugador que no sabe situarse. El buen jugador está siempre en situación tal, que no debe perder tiempo en recibir ni entregar el balón. Dan vueltas sobre sí mismos, por falta de no saber situarse bien. El juego de cabeza no saben practicarlo muchos jugadores y se consigue bastante en un entrenamiento bien hecho.  Equipo actual (1950) del Gerona F.C. Pujol - Imbert - Tremoleda - Vadillo - Fábregas - Sierra - Costa - Franch - Pujolrás - Fontanet - Xirau - Guirado
No basta haber sido un buen jugador, para ser un buen entrenador. Hace falta saber hacer comprender a los jugadores que entrena, todo aquello que les quiera enseñar. Un hombre puede ser muy inteligente y dominar un arte, una ciencia o bien una profesión y en cambio le puede faltar la facilidad en inculcar a otro, todo cuanto el sabe. Este aspecto creo se trató recientemente en la Federación Española. Debe ser el amigo de todos. Aspecto ese muy importante y que no todos poseen.
Sin duda el árbitro cuando sale al campo conoce perfectamente su misión; pero cuando llega el momento, comete errores y debilidades. Como humano que es, yerra, y muchos se dejan influenciar ya que una cosa es conocer al dedillo el reglamento y otra bien distinta, aplicarlo con justicia en el transcurso de un partido, pues para ello hace falta tener la cabeza fría y si un jugador se deja llevar de los nervios y la mayor parte del público pierde la serenidad, también puede ocurrirle lo mismo al árbitro y por tanto precisa también este sea un hombre imparcial, con dominio de si mismo y enérgico; cosas que sin duda al facultarle para arbitrar, hay que tener presente. Si mal no recuerdo, se tomó un acuerdo, de controlar los arbitrajes de cada uno de ellos y al llegar al final de temporada, bajaba de categoría, ascendía o bien se quedaba en la que militaba según hubieran sido sus actuaciones.
Cuando un jugador comete una mala jugada, el público le abuchea. Pero el error de un jugador es el de un hombre solo y en cambio si mucha parte del público fueran jugadores, veríamos muchos más errores. Es muy difícil, como en todos los órdenes de la vida, ser ecuánime. El público, de la misma manera que pone en el pináculo de la gloria a un jugador, le hunde. Hay que partir de la base (y esto lo sabe todo hombre que ha practicado el fútbol), de que un jugador, nunca tira un balón fuera de puerta por ejemplo, adrede, sino que toda su intención es hacer el gol. Puede darse el caso en un sinvergüenza, que no tenga interés alguno en jugar, pero a éste creo se le conoce enseguida. Si un jugador internacional pierde una gran oportunidad de marcar o bien tirar un penal fuera, ¿porqué no le puede ocurrir lo mismo a un jugador del Gerona, por ejemplo? Cuando un hombre da todo lo que puede en el campo, no se le puede pedir más. Si es malo, no depende de él, el que siga jugando sino de quien o quienes insisten en alinearlo.
Hay dos clases de socios. Los buenos y los malos. El buen socio, coopera siempre con el Club, tanto si las cosas van bien como mal. El mal socio, a la primera ocasión que se dá un tropezón, rompe el carnet. Los hay que cuando viene el verano, para no pagar los meses de descanso, se dan de baja y al empezar la temporada, ingresan nuevamente. Con estos socios, ningún Club hará nada. Mejor es no contar con ellos y tenerlos bien conocidos. El buen socio, hace todo lo que puede para que no muera su deporte favorito. Cuando vienen las cosas mal, sigue prestando su colaboración. Estuve una vez en las oficinas del Club y hablando de esos aspectos ví unas fichas en que efectivamente se llevaba un control de todo socio que se daba de baja y las causas, para a su reingreso, tenerlo en cuenta. A menudo el mas socio censura a la Junta; para él, todo se hace mal y para corregirle no habría como hallar la manera de que formara parte de la Junta, durante un tiempo y así cuando tocara de cerca los sinsabores de toda persona que es parte integrante de un órgano rector, tal vez aprendería a saber que desde fuera todo es fácil y todos hallamos buenas soluciones, pero desde dentro ya es otro cantar. Censurar es barato. El Gerona cuenta con pocos socios si se compara con otros Clubs quizás de menos solera.
En la Conferencia Internacional de Arbitros de 1948, fué decidido por 28 paises el sistema diagonal (figura 1):  -- -- Los jueces de línea cubrían las àreas A y B. Cuando un ataque se desarrollaba sobre el gol X, el Juez de línea de la zona A, se posicionaba en la línea de gol o en el córner. El juez de línea encargado de la zona B actuaba en el mismo sentido si el ataque partía sobre el gol Y. Véase a continuación (figura 2) el diagrama conocido hoy día, con el "sistema de control en diagonal", instituído en 1933, cuando la Federación de la Liga inglesa instruyó a los árbitros ingleses para controlar el juego. La diagonal imaginaria usada por el árbitro es la línea X Y. Los jueces de línea adoptan sus posiciones según la del árbitro. Si el árbitro está cerca de X, el juez de línea B se situará en un punto entre C y D. Cuando el árbitro está en Y o sus aproximaciones, el juez de línea A se situará en el punto entre R y S. Por consiguiente, cuando un gol parece inminente, dos "jueces" vigilan la "zona de peligro", uno a cada lado del campo. Cada juez de línea ocupa la mitad del campo correspondiente a uno de los equipos. Si un ataque se desdenvuelve de una mitad a la otra del terreno de juego el aspecto posicional de los jueces de línea, permite la vigilancia más absoluta del supuesto ataque. El sistema carece de éxito si uno de los jueces de línea se situa entre P y Q cuando el árbitro está en X; o alternativamente, si el juez de línea B está situado entre E y F cuando el árbitro se encuentra en Y. El objetivo es evitar la coincidencia de dos jueces en una misma parte del terreno de juego. Como digo anteriormente, este sistema fué reconocido como el mejor por los delegados de 28 paises que acudieron a la Conferencia Internacional de Arbitros celebrada en Londres en Marzo 1948. Por último (figura 3) veamos un diagrama de control de juego que está en vigor en Rusia. El árbitro actúa a la vez como juez de línea, actuando a lo largo de una de las líneas de banda. Los otros dos oficiales se situan en la opuesta. En este sistema el árbitro es el comisario supremo de todo el terreno de juego y los jueces de línea A y B hacen el papel de ayudantes, en cada mitad de la línea de banda, opuesta a la de éste, más el área sombreada en el diagrama.
Competiciones de Liga Primera División: Árbitro, 1.000 pts. Jueces de línea, 150 por partido Copa Generalísimo Cuartos de final, 1.500 y 150. Copa María Eva Duarte de Perón. 1.500 y 150. Campeonato nacional de aficionados. Primeras eliminatorias, 200 y 30. Cada jornada de Liga en las tres Divisiones a 1.300, 650 y 330 pesetas por arbitraje y jueces de línea ofrecen un total de 209.920 pesetas que multiplicadas por 30 jornadas suman 1.099.200 pta. ¿Y los gastos de desplazamiento con dos viajes nocturnos en cama y 125 ptas. diarias de dietas?. En ocasiones con triples, porque el árbitro va acompañado de dos compañeros de Colegio, es decir, el auténtico "equipo arbitral". ¿Por cuánto habrá salido el Barcelona por ejemplo el desplazamiento de García Fernández? Cuatro etapas: Santander-Madrid, Madrid-Barcelona, Barcelona-Madrid y Madrid-Santander, todas en 1ª clase y dos de ellas con cama? Y las dietas de cuatro días por lo menos suman por si solas 500 ptas. En el partido contra el Murcia jugado el día 1º de Octubre 1950, creo que el Barcelona, también solicitó el árbitro y los dos jueces de línea, del mismo Colegio. Todo sumado pasan de los tres millones por temporada. José Martinell |
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