Primer asalto de Montjuich (I).

Día 5 de Julio de 1809 (1ª parte)

Extracto del "Diario de Gerona".

Santoral: noticias relativas al sitio: parte del gobernador de Montjuich de fecha 4 y contestación del general Alvarez del mismo día: partes de D. José Bertrán de fecha 26 y 27 de Junio: é instrucción para la compañía de Santa Bárbara.

Noticias del sitio: "La formidable batería que se anunció ayer haberse presentado de 17 piezas colocadas en el declive del monte que hay á la izquierda de San Luis y á distancia de medio tiro de fusil del castillo de Montjuich, hace un fuego incesante contra el baluarte de la bandera, la cortina contigua, y el rebellín que lo cubre.

"Otra batería de seis troneras, con tres ó quatro piezas se descubrió ayer mañana en el segundo cerro de la casa de Roca dirigida contra los baluartes de la plaza, la que empezó luego á disparar granadas y bala rasa; de manera que el continuo fuego de esta, las ocho y más bocas de que se componen las otras dos baterias entre San Narciso y San Daniel y á la izquierda de esta torre, contra el mencionado castillo, el bombardeo eterno, que no por esto para, y nuestra brillante artilleria, que por todos los puntos despliega con un extraordinario acierto todos los resortes de su habilidad, forman un estallido espantoso, que parece un remedo del infierno; á bien que habituados ya los gerundenses á estos horrores, conservan su sosiego, y están á prueba de todo quanto el enemigo quiera intentar".

Sucesos del sitio.

A las diez y cuarto de la noche anterior, dos columnas enemigas de unos mil hombres cada una, se presentaron con mucho silencio delante del frente batido del castillo de Montjuich con la intención de tomarlo por sorpresa y por asalto. Al quien vive de nuestros centinelas, el coronel Fleury contestó Francia. Rompieron enseguida los enemigos un vivo fuego de fusil contra el rebellín, baluarte y cortina, por lo que al momento se coronó todo el recinto con la guarnición, y se dispusieron las granadas de mano, sacos á foso, barriles fulminantes y demás fuegos artificiales convenientes para el caso, contestándose además el ataque con un vivo fuego de cañon, obús, mortero y fusil.

Advirtiose inmediatamente en la plaza el ataque de Montjuich, y comprendiéndose la intención de asaltarlo se tocó generala. La campana mayor de la Catedral dejó oir sus vibrantes y repetidos sones, y todo el mundo, paisanos y soldados, frailes y sacerdotes, mugeres y niños, ocuparon sus sitios con el mayor orden y entusiasmo, quedando la guarnición sobre las armas en sus cuarteles y ocupando los paisanos los baluartes y muralla.

Mientras tanto los asaltantes del castillo continuaban con la mayor decision su empresa. Una de las dos espresadas columnas entró sin pérdida de tiempo en el camino cubierto, que la guarnición por falta de gente no tenía ocupado y parte bajó al foso con escalas, prevenida de los útiles necesarios para allanar la brecha y dar el asalto. La otra columna se colocó en frente del rebellín y empezó un vivo fuego para llamar la atención de las tropas que lo guarnecian. Fue entonces el momento culminante. El castillo además de su nutrido fuego, disparó continuamente balas de iluminación al campo enemigo y pudiendo con ello hacer punteria, rompieron con ello un vivísimo fuego los baluartes de la plaza y la torre de San Juan, así de mortero como de obus, habiéndose visto caer muchas bombas y granadas en medio de los enemigos, observándose que estos retiraban del glacis gran número de heridos.

Un obús que oportunamente se habia colocado en el tambor que cubría la puerta de poterna que salia al puente que atravesaba el foso para la comunicaicón con el rebellín sobre el frente atacado, hizxo un vivo fuego de metralla sobre los asaltantes durante el ataque. El sargento primero del regimiento de Ultonia Juan Saez que con una porcion de granaderos del mismo cuerpo se hallaba trabajando en la cortadura, se formó con ellos sobre la cresta de la brecha ó cuerpo descubierto y permaneció en ella hasta que cesó el ataque.

Por fin, despues de media hora de un combate el más violento, los enemigos se retiraron con precipitacion, abandonando muchos muertos en el foso y camino cubierto, y dejando multitud de útiles, escalas, morriones, fusiles y demás despojos militares.

El comandante Fleury, dando seguridades del éxito, había llevado á efecto, por su cuenta, este infructuoso asalto. Así se desprende de las versiones francesas.

Nuestra pérdida consistió en 4 muertos y 21 heridos. La del enemigo hubo de ser considerable.

Vaccani dice á propósito de esta acción: "Fuese abandono ó temor á una sorepresa del camino cubierto, no se hallaba este ocupado por los españoles aquella noche; se mantenian encerrados en sus obras, y tan pronto como se dieron cuenta de la presencia, asaz temeraria, del enemigo en el foso, lanzaron sus fuegos de todos lados y tal número de granadas y hasta de piedras sobre los asaltantes, que, sorprendidos estos de tan imprevista y cruelísima tempestad, se desbandaron, perdiendo 40 hombres antes de llegar al punto de donde habian partido".

Los franceses procuraron atenuar la importancia de este suceso. Verdier preocupándose del mismo, empero, resolvió adoptar todas las precauciones para acercarse al castillo á favor de los trabajos de zapa, establecerse en el camino cubierto, perfeccionar la brecha, construir gran número de traveses en la trinchera, levantar nuevas baterías y dar el segundo asalto cuando tuviese sus obras avanzadas á cincuenta metros de distancia del camino cubierto del rebellín.

El general Alvarez subió aquella mañana á Montjuich y con una jovialidad muy rara en él, elogió grandemente la conducta de los defensores y al ofrecerles su proteccion, habló particularmente á muchos y hasta llegó á chancearse con algunos, sobre las peripecias del asalto.

Durante el día el fuego fue por ambas partes, más horroroso que el anterior. La batería Imperial amaneció completa, con 20 cañones y 2 obuses todos de gran calibre, haciendo mucho estrago, perfeccionando la brecha de su frente y suavizando la rampa por medio de las granadas que hacían reventar sobre el mismo terraplen.

En el castillo se continuaron la perfeccion de la cortadura y los demás trabajos, empleándose en los de menos riesgo una brigada de paisanos jornaleros.

Por la tarde se vieron subir desde Sarriá á la torre de San Luis unos 400 hombres con una fagina cada uno.

Las baterias contra la plaza, en especial la de morteros, hicieron mucho daño en el caserío del barrio de San Pedro, arruinando las bombas varias casas.

El Diario de Gerona del 6 de julio, dio cuenta del asalto, consignando lo siguiente:

"Inmediatamente que se advirtió el asalto, que los enemigos intentaban contra el castillo de Montjuich en la noche del 4 al 5, acudió á la casa del Sr. Comandante General todo el Estado Mayor del exército de Vanguardia, y el de la Plaza compuesto de los Gefes de artilleria é ingenieros los Coroneles D. Isidro de La Mata, y D. Guillermo Minali, del Teniente de Rey Brigadier de los Reales exércitos D. Julian de Bolibar, del Sargento Mayor de la Plaza el Teniente Coronel D. Juan Francisco Molinas, con sus Ayudantes D. Joaquin Pals y D. Buenaventura Ferrari, D. Antonio Estrada, D. Manuel Odry, el capitán agregado á esta Plaza D. Pedro Puig, del Capitan de llaves D. Pedro Carrión, el Capitán de Migueletes D. Narciso Mutger agregado al del exército, y del Gefe de día el Teniente Coronel Graduado, Capitán del Regimiento de Ultonia D. Lorenzo Fitz-Gerald.

"Mandose tocar la generala y al momento la guarnición y valerosos vecinos de esta Ciudad se presentaron á recibir las órdenes, quedando la primera á consequencia sobre las armas en sus quarteles, y los segundos ocuparon con animosidad los puestos que tienen señalados. Concluido el ataque se ofreció al referido Gefe de día á subir al dicho Castillo á informarse del resultado, lo que verificó con prontitud dando parte á dicho Señor General de la gloriosa resistencia de aquellos defensores. Enseguida se hizo la acostumbrada ronda para dar las debidas gracias al vecindario por la exactitud con que manifestaban el celo por la defensa de la Plaza, mandando retirar á todos los que acudieron de refuerzo, y seguir su acostumbrado turno por mitad.

"Hasta las Señoras Mugeres de la compañía de Santa Bárbara no acabada aun de formar, se presentaron y las Comandantas enviaron dos Capitanas para que en cumplimiento de su instituto manifestasen al General con las más finas expresiones, en donde debían hallarse los auxilios de cartuchos, aguardiente y demás según se había dispuesto en el mismo día: dioles dicho General las gracias, haciéndolas saber lo mucho que esperaba de su celo y heroyco patriotismo, y que ya podían retirarse por haber cesado el motivo de la generala".

Nieto Samaniego reseña también el asalto de este día en los siguientes términos:

"El Castillo de Monjuic á quien dirigió desde luego el Enemigo sus principales miras, era vigorosamente atacado por todos los medios conocidos en el arte de sitiar. Bala rasa, bomba, granada, metralla, morteradas de piedras y cascos de bombas, fusileria, estrechez y aproximación de líneas paralelas del sitiador; brechas y trabajos para defenderlas, alarmas, asaltos, ataques nocturnos, dificultad de comunicación con la Plaza, mala qualidad del agua potable, y enfermedades; todo concurrió progresivamente en el decurso de este mes, á hacer horrible aquella mansion, proporcionando á los invictos que la defendían, el cubrirse de la inmortal gloria que solo á tanta costa puede llegar á adquirirse; colmando la excelencia de sus hechos, el sabio y prudente abandono que hicieron de este castillo.

"Reducidos á escombros y necesariamente abandonados los tres puestos que en otros tantos reductos con nombre de torres eran el ante mural del castillo, 20 cañones de á 24 baten en brecha desde una sola bateria la mitad de la cortina que mira al norte, otros cañones la baten por lo que hace frente á levante, desde las inmediaciones de la torre de San Daniel y San Narciso, los morteros y obuses desde la parte de casa Roca, y así este pequeño y no concluido castillo estaba entre tres terribles fuegos que le batían por tres de sus quatro frentes.

"Cruelmente fatigada con tanto fuego la heroyca guarnición, la brecha practicable, y siendo capaz de 40 hombres de frente, guarda silencio el castillo, ya por estar casi del todo apagados sus fuegos, y ya por no desperdiciar munición y trabajo, en fusileria inútil contra unos enemigos que estaban del todo á cubierto en sus parapetos; sacando acaso el enemigo de este util y bien meditado silencio, no menos que de la práctica de tan espaciosa brecha, pronósticos favorables para sus empresas, determinó en la noche del quatro al cinco asaltar la brecha, y ayudar el ataque con escalas por otros puntos.

"Aproximanse gruesas columnas de bravos, ellos se han prometido llevar el esterminio y asegurar la victoria dentro de los muros de Monjuic, pues que le asaltan sin intimarle la rendicion. La furia va conduciendo en la obscuridad de la noche sus atrevidos pasos. Los Belites herederos de la bravura y nombre romano, se disputan la preferencia en asaltar la brecha, y han concebido el logro de algunos grados por esta victoria.

"Pero apenas se acercan á tiro, un diluvio de balas de nuestra fusileria junto á una multitud de bombas, y granadas, que sin interrupción despide la Plaza, empieza á sembrar entre ellos el destrozo y el terror; no obstante, los más atrevidos llegarán hasta el foso que les está destinado por sepulcro; y todos experimentarán á pesar suyo, que es terrible y misterioso el fatal silencio del castillo, y que no falta en él quien maneje las armas en habiendo ocasión de aprovechar sus tiros.

"El venturoso resultado fue del todo opuesto á lo que se prometian, pues fueron rechazados completamente, dexando en el foso y glacis muchos cadáveres y algunas escalas: los defensores del castillo gustaron aquella satisfaccion militar, que determina á los guerreros á procurarse nuevas glorias, y á tributar grandes servicios á la Patria, llenando de terror á los fugitivos que en vano se apartan del lugar en que el destino les tiene determinado su sepulcro como se verá luego.

"Esta acción fue del todo gloriosa para nuestras armas, pues que á más de las interesantes ventajas que produxo, solo nos costó dos ó tres muertos, y los heridos que expresa la siguiente relación: es verdad que siempre es inapreciable la sangre de los bravos!

"Relación de los heridos que resultaron del primer asalto que dió el Enemigo al castillo de Monjuic, en la noche del 4 al 5 del corriente mes:

De bala de fusil
16
De casco de bomba, ó granada
3
Quemados
5
Fracturados y contusos de rechazo de piedra
4
Total
28

Parte del Gobernador de Montjuich de fecha 5 de julio.

"Sobre las diez y cuarto de esta noche los enemigos han atacado este castillo con el intento de asaltarlo; según el parte que me dá el comandante del rebellín, dos columnas se dirigieron, la una á impedir el fuego de dicho rebellín y la otra á la brecha; con la mayor celeridad y orden, se puso toda esta guarnición sobre las armas y cubrió los puntos principales, haciendo el fuego más vivo en el baluarte atacado, con granadas, metralla y fusileria: el obus de á seis colocado en el tambor que sale al rebellín, hizo un vivo y acertadísimo fuego sobre la brecha. Se han hallado en ella y en el foso varios muertos y visto otros sobre el camino cubierto, cuyo número no puede saberse fijamente por el fuego del enemigo, la oscuridad de la mañana y el cuidado y diligencia con que el enemigo retiró sus muertos y heridos. Se han recogido en el foso varios efectos, como palas, picos, morriones, etc. Un herido enemigo del cuerpo de zapadores ha sido conducido y curado en este castillo. El orden y serenidad con que toda la guarnicion se ha conducido en esta lucha, ha contribuido á la precipitada fuga con que los enemigos han abandonado su empresa.

"Todos los oficiales y tropa de los distintos cuerpos que componen esta guarnición, se han portado con la bizarria más recomendable, distinguiéndose todos en el cumplimiento de sus respectivas obligaciones, tanto los señores oficiales de artilleria, como los de infanteria. Es ocioso hacer presente á V.S. la conocida actividad de mi segundo comandante, llevando las órdenes con la mayor prontitud á los puntos atacados. El espíritu y valor de D. Vicente Mas, subteniente del Regimiento de Borbón, y de D. Paulino de Micalet, teniente del primer tercio de Gerona, son dignos de recomendación. También debo recomendar á V.S. el celo con que el capellan del castillo D. Joseph Casas, se transfirió á los puntos más expuestos para socorrer á los heridos. Se necesita el relevo del capitán del 2º de Barcelona, D. Joseph Palés, comandante del rebellín con motivo de la fuerte contusion que ha recibido en la cintura.

"La lista detallada por cuerpos de los muertos y heridos se dará separadamente. Dios guarde á V.S. muchos años. Castillo de Montjuich 5 de Julio de 1809.-- Guillermo Nash.-- Sr. D. Mariano Alvarez.

"P.D. El capitán del 2º de Barcelona D. Joseph Palés á pesar de la grave contusion que ha recibido se mantiene en el castillo y quiere continuar su destacamento".

Oficio del General Alvarez al gobernador del castillo de Monjuic (1).

"Me ha llenado de gozo la bizarria y buen orden con que esa guarnición valerosa rechazó anoche los ataques del enemigo en la conformidad que V. detalla en su oficio de hoy y documentos que incluye; mientras me ocupo en arreglar y distribuir los premios y distinciones á los beneméritos que sobresalieron en accion tan brillante, doy á V. en nombre del Rey y de la nación, las más expresivas gracias, por la feliz dirección de ella, no menos que á su segundo Sr.D. Blas de Fournás, al capellán D. Joseph Casas, y á toda la oficialidad y tropa que tan dignamente se portaron; á quienes lo comunicará V. para su inteligencia y satisfacción.

"Dios guarde á V. muchos años. Gerona 5 de Julio de 1809.-- Sr. D. Guillermo Nash".

Emilio Grahit y Papéll


Notes

(1) - Este oficio impreso en el Diario de Gerona del 17, con fecha del 8, fue recibido por el Gobernador de Montjuich el día 5 que es el de su verdadera fecha y por consiguiente se refiere al primer asalto y no al segundo, como lo dió á entender esta equivocación.
Tornar al text




Granader a peu del 3r Regiment de la Guàrdia Imperial, Holandès. Gravat de Bellange. (Wikipèdia)



Uniforme de la Compañía Fixa de la Plaza de Rosas, basada en una làmina de l'obra d'Ordovàs, i el dibuix de José Maria Bueno a Uniformes Militares Españoles". Dibuix de Fèlix Xunclà.



Governador de Plaça, uniforme basat en una làmina de l'obra d'Ordovàs, i el dibuix de José Maria Bueno a Uniformes Militares Españoles". Dibuix de Fèlix Xunclà.



Cuirasser 1808-1809. Làmina de Bellange. (Wikipèdia)



Oficial de Granaders 1808-1809. Làmina de Bellange. (Wikipèdia)



Granader 1808-1809. Làmina de Bellange. (Wikipèdia)



Voltigeur de la Guàrdia Imperial, 1808. Làmina de Bellange. (Wikipèdia)


Bibliografia.

Extret de "Reseña histórica de los Sitios de Gerona en 1808 y 1809". Emilio Grahit y Papéll, Imprenta y libreria de Paciano Torres, Gerona. 1894.


Back-Index-Next