Estaba formada por un capitán, un teniente, un subteniente, cuatro sargentos, ocho cabos y 75 individuos.
Capitán: Don Francisco Salvador de Delas: por disposición gubernativa salió de la Ciudad, con permiso para volver á ella.
Teniente: Don Francisco Javier de Perramón: se distinguió muy particularmente en la avanzadilla, cuando esta compañía ahuyentó al enemigo de las casas inmediatas á la puerta de Francia, apesar de la superioridad de fuerzas enemigas.
Subteniente: Don Jerónimo Ametller, presbítero: el día del grande asalto de Montjuich pasó al rebellín atacado del mismo, para acudir con los auxilios espirituales á los invictos defensores de aquel arriesgadísimo punto, que habían quedado heridos y exánimes.
Primera escuadra.-- Sargento primero.-- Francisco Orri: fue herido y el general Alvarez le agració con un escudo de valor.-- Cabo primero.-- D. José Atance.-- Cabo segundo.-- D. Jaime Planella: habiendo sido nombrado teniente de la segunda compañía, prefirió servir de cabo en ésta de reserva del general, para poder acudir á los peligros más inmediatos.
Individuos.-- Bartolomé Ventura.-- Pablo Pou.-- José Bonet.-- Nicolás Dou.-- Pedro Suyastres: cabo honorario, véase la nota al final de esta relación.-- Raimundo Prats.-- Miguel Vilardell.-- Tomás Surroca.-- Miguel Bosch.-- Jaime Barnés.-- Damián Rogés.-- Miguel Peradejordi.-- Francisco Monté.-- Francisco Vilalta.-- Miguel Palol.-- José Molins.-- Félix Soler.-- Francisco Roges: véase la nota al fin de esta relación.-- José Manlleu.-- Juan Soler.-- Carlos Pons, presbítero: individuo honorario.
Segunda escuadra.-- Sargento segundo.-- D. Salvio Banchs, domero de Cornellá: fue capellán de honor del general Alvarez durante el sitio: durante el segundo sitio, en 1808, al tener lugar el ataque que la guarnición y las fuerzas libertadoras, hicieron á los enemigos, en lo mas vivo del fuego de artilleria y fusileria que hacían estos desde casa Roca, en unión de otros catorce paisanos, atacó una de aquellas baterías y entrando en ella se llevaron un carro de efectos de guerra, destrozando é incendiando lo demás que no pudieron llevarse, regresando al baluarte de San Pedro perseguidos por la caballeria enemiga que casi había logrado cortarles; fue el iniciador de la compañía de reserva del general: fue nombrado comandante de los almacenes de la plaza: despues del grande asalto de Montjuich, al regresar de allí con los demás de esta compañía, pidió permiso que le fue concedido, para volver al castillo, para prestar los auxilios espirituales á los heridos: el día del asalto general de la plaza, desplegando una actividad asombrosa, logró que los defensores de las brechas tuviesen constantemente abundancia de municiones de guerra, apesar de la gran cantidad que se consumió, por lo que el general Alvarez le dió las gracias delante de su estado mayor.-- Cabo primero.-- Francisco Escarrá.-- Cabo segundo.-- Francisco Gibert.
Individuos.-- Agustín Suñer.-- Juan Salabert: se distinguió muy particularmente en la avanzadilla indicada al hablar del teniente de esta compañía: véase además la nota al fin de esta relación.-- Pedro Garriga.-- Magín Cabané.-- Tomás Frigola.-- Jaime Ballescá.-- Juan Company.-- José Perona.-- Narciso Constans.-- Manuel Coderch.-- José Boixó.-- José Corbera.-- Benito Puig.-- Paladio Genís.-- Pablo Riba.-- Narciso Sellas.-- Luis Sala.-- Narciso Barraquer.-- José Bertrán, presbítero, domero de Llorá: honorario: es el intrépido guerrillero de Portsacreu.
Tercera escuadra.-- Sargento segundo.-- Félix Perez.-- Cabo primero.-- Jaime Palter.-- Cabo segundo.-- Paladio Vidal.
Individuos.-- Jerónimo Camó.-- Pedro Fuster.-- Salvador Roure.-- Salvador Geli.-- Rafael Silvestre.-- Domingo Gas.-- Félix Sabat.-- Narciso Rotí.-- Pedro Texidor.-- Juan Llavari.-- Ignacio Valentí.-- Pedro Antonio Compte.-- Juan Falgueras.-- Froilán Vivern, murió.-- Romualdo Mirosa.-- Francisco Galter.-- Bartolomé Esteve.-- Andrés Arnus y Pujol.
Cuarta escuadra.-- Sargento segundo.-- Benito Bosch.-- Cabo primero.-- José Molins: fue contuso: véase la nota al final de esta relación.-- Cabo segundo.-- Ramón Verneda.
Individuos.-- José Queralt.-- Narciso Sureda.-- Juan Barrasetas: véase la nota al final de esta relación.-- Hipólito Roure.-- Francisco Barcells.-- Salvador Bosch.-- Mariano Comas.-- Antonio Planas.-- Esteban Grau.-- Francisco Malavila.-- Francisco Detrell.-- José Vehí.-- Agustín Xifreu.-- José Pujol.-- José Cabot.-- Tomás Casalíns.-- Cayetano Vergés.-- José Puig.
Esta compañía tenia señalado como punto de residencia, el alojamiento del general Alvarez, que estaba en la cas de Pastors. Tenía la misión de acompañar al general y acudir á los puntos atacados y de mayor riesgo, lo que desempeñó con el mayor ardimiento y valor. El día del grande asalto de Montjuich subió a dicho castillo á pesar del fuego que le hizo el enemigo desde todas sus baterías y apostaderos.
El día del asalto general de la plaza, acudió á la defensa de la brecha de Alemanes, llegando en lo más sangriento del combate y en ocasiones en que los enemigos se habían introducido en las cuadras del cuartel. El cabo José Molins y los individuos, Pedro Suyastres, Juan Salabert, Juan Barrasetas y Francisco Rogés, despreciando el inminente peligro y las bayonetas enemigas, fueron los primeros de esta compañía que atacaron con las suyas á los asaltantes y dieron muerte á cuantos habían logrado entrar en una de las cuadras del cuartel de Alemanes. Estos esforzados patricios y los demás de la compañía, juntamente con la tropa y otros paisanos y eclesiásticos, tomaron parte en aquella sangrienta lid y no descansaron hasta que después del terrible combate que describiremos en su lugar, se logró poner en fuga á los enemigos que con el mayor empeño y confianza asaltaron por cuatro veces seguidas aquella memorable trinchera.
Todos los demás hombres que había en Gerona, así vecinos como expatriados, escepción hecha tan solo de los niños, viejos y físicamente impedidos, tenían igualmente las armas, teniendo á su cargo los lienzos y cortinas de muralla de la plaza en toda su extension, cuyo penoso servicio cumplieron constantemente con el mayor entusiasmo y deicisión.
Los niños, viejos y físicamente impedidos trabajaban en la elaboración de cartuchos.
La Cruzada Gerundense ocupaba un tercio de su fuerza en el servicio diario. Los capitanes alternaban con los subalternos en sus compañías. Al ponerse el sol y cuando la guarnición enviaba sus retenes debían hallarse en su puesto el oficial de cruzada y su gente, y dar parte al de la tropa que cubría el punto de cualquier falta que notase su fuerza. Este lo pasaba inmediatamente al General, quien tenía elegido á su ayudante de campo el teniente coronel D. Felipe de Boixons para que exijiese diez libras catalanas de multa al individuo de la Cruzada que faltase á su puesto, ya fuese al toque de generala, o bien el día que debiese entrar en servicio, aplicadera dicha multa á gratificar á la tropa de la guarnición empleada en los trabajos de mayor peligro.
Los demás paisanos armados, que tenían señalada la muralla, estaban sugetos igualmente á la multa indicada. Los prohombres de los gremios debían dar parte de los individuos que faltasen del suyo respectivo en casos de alarma para exijirles dicha multa, quedando ellos en otro caso conminados con la misma.
Las compañías de la Cruzada gerundense fueron instruídas en el manejo del arma por oficiales de la guarnición, y como solo se les enseñó la carga y hacer fuego, se pudo tenerlas dispuestas en breve tiempo, de modo que en 12 del mismo junio empezaron á hacer servicio.
Por el fuego del enemigo tuvieron estas compañías unas cuarenta bajas entre muertos y heridos. De los oficiales hubo dos muertos, tres heridos y un contuso.